La alarma sonaba, pero ella se sentía
aun bajo los influjos de un alargado letargo, y no era que aun estuviera
dormida, sino todo lo contrario, ya que había permanecido despierta toda la
noche, de hecho muchas noches, pareciese como si toda su vida la hubiese pasado
dormida, así se sentía ella continuamente, una vida carente de sentido, común a
la de los otros millones de personas que le rodeaban, incluso de aquellos que
jamás llegara a conocer.
Lentamente recorrió su cuerpo
carnal a la orilla de la cama, el único bien que aun poseía, y observo con desdén
el reloj cuyo incesante y cansino ritmo
apenas perceptible bajo el estruendo de la alarma que del mismo procedía, lo
silencio de inmediato, solo para que sobreviviese ese ruido que le molestaba
aun más que la alarma, porque le recordaba lo inútil que era su vida si se
desperdiciaba constantemente, como si fuera ella un reloj de arena y cada Tic-tac la acercara más a su anticipado
final.
Se levanto de la cama y se
despojo de sus ropas, entro a la ducha para preparase para otro tedioso día de
su rutina, siempre molesta, siempre triste, siempre esperando, aquel día algo
importante pasaría, y no es por menospreciar a los humanos, lo cierto es que existe
una gran verdad, la esperanza siempre muere al último. Así que como adivinará
el lector, esta historia habla de esto que damos muchos y otros tantos no tanto
por sentado.
Muchos pasamos la vida de aquí para
allá muchos sin siquiera pensando en el significado de la misma, para aquellos
más perceptivos, perder el camino es simplemente imposible, porque de alguna
manera logran intuir esa fuerza que los ata, no son conscientes porque no lo
logran comprender, y son afortunados en cierta forma porque viven felices sin
saber por qué, y no necesitan saberlo, de ese mismo grupo existen aquellos que
intentan explicar esa sensación con lo que conocen, y en su obsesión llegan a el
fanatismo muchos dedicados a lo que llaman religión otros a lo que conocen como
ciencia, y los menos afortunados y los que abundan cada día más en este mundo
son aquellos que como aquella persona que se encuentra duchándose simplemente
han perdido la esperanza de vivir, es aquí donde comienza esta historia, de
cómo los humanos caen presa de lo desconocido.